miércoles, 16 de septiembre de 2020

 

Formalización De Empresas


¿Qué significa formalizar una empresa?

La formalización es el proceso que llevan a cabo las empresas para incorporarse a la economía formal.

Presenta diversas dimensiones:

•Registro y concesión de licencias por parte de las autoridades nacionales, provinciales y municipales;

•Acceso a la seguridad social para el propietario de la empresa y sus empleados;

•Cumplimiento del ordenamiento jurídico vigente, entre otras cosas en materia de impuestos, cotizaciones a la seguridad social y legislación laboral.

La formalización es un proceso gradual. Un empresario podrá, por ejemplo, contar con una licencia municipal de funcionamiento para llevar a cabo sus actividades desde su ubicación sin haberse registrado en la agencia tributaria, la oficina de empleo y la seguridad social.

¿Por qué promueve la OIT la formalización de las empresas?



El objetivo último de las iniciativas de formalización empresarial es crear más y mejores empleos, reducir la pobreza y abordar la marginalización de quienes son especialmente vulnerables a los déficits más graves en materia de trabajo decente en la economía informal, incluyendo, aunque no únicamente, a las mujeres, los jóvenes, los migrantes, las personas mayores, los pueblos indígenas y tribales, las personas que viven con el VIH o que están afectadas por el VIH o el sida y las personas con discapacidad. Para los gobiernos y la sociedad, la formalización de las microempresas y las pequeñas y medianas empresas guarda una estrecha correlación con un entorno empresarial propicio, el crecimiento económico y la mejora de las condiciones de trabajo. También permite incrementar los ingresos fiscales que, a su vez, son necesarios para proporcionar bienes y servicios públicos. Las empresas formales se benefician de los procesos de formalización, porque con ellos se reduce la competencia desleal que representan las empresas informales. Las empresas formalizadas tienen acceso a financiación, servicios y tecnologías de desarrollo empresarial, y se exponen en menor medida a sanciones gubernamentales. También pueden participar en licitaciones públicas o actuar en calidad de proveedoras o minoristas de empresas más grandes.

La formalización empresarial es parte de un enfoque multidimensional y equilibrado, tal como se indica en la Recomendación núm.

Ventajas de ser formal


Desde luego, este aupicioso futuro significa que más empresas gozarán de las oportunidades que trae consigo la formalización. ¿Cuáles son esos beneficios que tendrás si decides sumar tu empresa a esta tendencia?

·        Podrás solicitar préstamos o líneas de crédito como persona jurídica.

·        Tendrás la oportunidad de participar en licitaciones y hacer contratos con el Estado.

·        Gozarás de beneficios tributarios, de acuerdo al régimen en el que te encuentres.

·        Exportarás tus productos a cualquier parte del mundo sin problemas.

·        Tu empresa disfrutará de un prestigio que no tendrá cualquier negocio informal.

Los riesgos de la informalidad


·        Como informal tienes una cantidad de clientes limitada. Muchos no podrán trabajar con tu empresa por no ser formal, por ejemplo, el Estado.

·        Puedes ser sancionado por no cumplir con los requisitos mínimos de la ley.

·        No cuentas con beneficios laborales de las empresas formales, como seguro y seguridad social.

·        Otros negocios podrían usar tu nombre y marca, amparados por la ley.

·        No puedes acceder a los programas del gobierno ni a sus procesos de contratación.

·        No puedes ser proveedor del Estado ni de empresas grandes que exigen que sus proveedores sean formales.

Siete simples pasos

En ese sentido, ¿qué debes hacer para que tu negocio esté dentro de las reglas de juego? Aunque los rumores digan lo contrario, ahora formalizarte es más sencillo.

Busca y reserva el nombre de la empresa

Será de mucha ayuda para saber si existe otro negocio con igual o similar nombre al tuyo. En este paso, además, decide qué tipo de empresa constituirás.

Elabora la minuta de constitución

En este documento, tú o los miembros de la sociedad manifiestan su voluntad de crear una empresa. Para darle validez jurídica, deben contar con la firma de un abogado.

Abona capital y bienes

Tú y tus socios podrán aportar dinero y bienes. Abre una cuenta bancaria para depositar el monto reunido y realiza un inventario con los materiales que posee tu negocio.

Elabora la escritura pública

Después de realizar estos pasos, acércate a una notaría. El notario público será el encargado de firmar y elevar tu minuta a la categoría de escritura pública.

Inscripción en Registros Públicos

Este proceso, en su mayoría, es realizado por el notario. La escritura pública será llevada a SUNARP. A partir de ese momento, se formaliza la creación de tu empresa.

Inscripción al RUC

Dirígete a la SUNAT. Obtén el Registro Único de Constribuyentes. Este contiene los datos de identificación de las actividades económicas que realizarás como empresa.

Obtén la licencia municipal

Finalmente, acude a las oficinas del municipio donde se localice tu negocio. Recuerda que sin licencia no podrás poner en marcha tu empresa.

Formalizar tu negocio es el primer gran paso para alcanzar el éxito. En el Campus Virtual Romero contamos con un curso que te ayudará a  conocer más a detalle todos los aspectos comerciales, laborales y tributarios de este proceso de formalización.

¿Qué sabemos?



• La formalización de las empresas interesa principalmente a los ‘empresarios en busca de oportunidades’. Los empresarios con actividades de subsistencia no suelen contar con los medios, el conocimiento o la ambición para formalizar sus empresas;

• Los empresarios toman una decisión racional sobre la conveniencia de formalizarse: comparan los costos y los beneficios previstos si formalizan sus empresas y practican la economía formal. Cuando no se ofrecen ‘ventajas económicas’ para la formalización, muchos empresarios prefieren pasar desapercibidos;

• Reducir los costos de cumplimiento de la formalidad (impuestos, seguridad social y protección de los trabajadores) podría ser más conveniente que reducir los costos del proceso de formalización (el tiempo y el dinero necesarios para efectuar el registro);

• Probablemente, lo fundamental en la decisión de formalizar la empresa no son tanto los costos previstos sino los beneficios que pueden derivarse de ello;

• La reforma de la normativa sobre la puesta en marcha de las empresas puede lograr que se incremente la cantidad de empresas registradas, proporcionando una óptima relación costo-beneficio en términos de ingresos adicionales y creación de empleo;

• No basta con simplificar el registro de las empresas. También es importante que los empresarios aumenten la productividad, ya que así incrementan sus ingresos y, en consecuencia, su capacidad de sufragar los gastos asociados a la formalidad;

• Las intervenciones deberían incluir ‘zanahorias’ (incentivos) y ‘palos’ (medidas para garantizar su cumplimiento);

• Parece más sencilla la formalización de las empresas incipientes que la de aquellas que ya existen;

• Los grandes estímulos y la combinación de diversas medidas de reforma puede resultar más efectivo que los enfoques fragmentarios. Para obtener efectos significativos, las reformas aisladas tienen que logar una gran reducción de los costos de formalización.

No hay comentarios:

Publicar un comentario